El cabello es una formación de los folículos capilares, compuesto de una raíz y tallo de fibra de queratina. El pelo es fundamental para la proyección de una buena imagen. Sin embargo, existen muchos factores que pueden dañarlo. La nutrición capilar es de gran importancia para mantener la cabellera en perfecto estado. Por eso, a continuación te contamos cual es la mejor nutrición para el pelo.
Puede que nutrir tu cabello te parezca difícil. Pero la realidad es que conseguirlo es más fácil de lo que imaginas. Solo se necesita reconocer cuando el pelo carece de nutrientes. También conocer los demás estados del cabello, para aplicar siempre los productos necesarios. Sigue leyendo si buscas tener una melena en óptimas condiciones, perfectamente nutrida.
¿Qué es la nutrición para el pelo?
La nutrición capilar se encarga de reponer todos los nutrientes perdidos del cabello, pudiendo ser lípidos o grasa. Cuando el pelo se encuentra carente de nutrición, se nota poroso, voluminoso y con exceso de frizz. Esto ocurre principalmente por la pérdida de aceites en el cuero cabelludo.
Un correcto tratamiento de nutrición para el pelo, busca proporcionarle todos los compuestos faltantes. Propiciando un mejor brillo, flexibilidad y manejabilidad. Los productos utilizados para este propósito deben ser utilizados con moderación, puesto que nutrir en exceso la melena puede agregarle peso y grasa poco favorables.
¿En qué se diferencia la nutrición para el pelo de la hidratación y renovación capilar?
Ahora que se ha definido lo que es la nutrición capilar, es momento de saber en qué se diferencia con la hidratación y renovación del pelo.
Hidratación
La hidratación capilar consiste en tratamientos que ayuden a reponer el agua de las hebras. Es un procedimiento suave que puede aplicarse de forma localizada, necesario en cabellos resecos y sin brillo. Un cabello hidratado se mantiene suave, liviano y sin nudos excesivos.
Renovación
Una renovación capilar es un tratamiento más profundo. Este tipo de procedimientos buscan reparar las hebras capilares desde su interior. Con esto se consigue fortificar la cabellera. Para alcanzar este propósito se utilizan productos compuestos por creatina, keratina, colágeno o cisteína.
Este tipo de tratamientos deben ser indicados y aplicados por personas expertas en el sector capilar. Proporcionar proteínas en exceso a la cabellera resulta contraproducente, pues lo convierte en un cúmulo de hebras duras y quebradizas. Una excelente renovación capilar consigue un pelo resistente y elástico.
¿Por qué es importante saber diferenciar los distintos estados del pelo?
Es necesario conocer los estados que puede presentar el cabello y como tratarlos para escoger siempre los productos adecuados. Debe prestarse gran atención a los componentes de los productos que se pretenden aplicar. Aquellos que poseen keratina como ingrediente principal, no deben utilizarse si lo que se busca es nutrir el cabello. Ahí la importancia de saber la diferencia entre nutrición, hidratación y renovación.
¿Cuál es la mejor nutrición para el pelo?
Las mascarillas son la mejor solución para alcanzar una nutrición capilar profunda. En el mercado existen infinidades de productos destinados a este propósito. Si eres de los que confías en las más reconocidas marcas, no dudes en buscar una que se adapte a tus necesidades. Pero si prefieres sacarle el máximo partido a los ingredientes que tienes en casa, estas mascarillas naturales te serán de gran utilidad al nutrir tu pelo:
Mascarilla de aceite de oliva y jazmín
Ingredientes
- 2 cucharadas de aceite de oliva.
- 1 cápsula de aceite de jazmín.
- 2 cucharadas de acondicionador sin amoniaco.
Preparación
Se debe iniciar colocando el aceite de oliva y el de jazmín en un recipiente. A continuación se incorpora el acondicionador y se mezclan. Con el cabello húmedo, se unta el resultado en el cuero cabelludo y sus hebras, aplicando suaves masajes. Debe dejarse actuar durante 20 minutos.
Pasado el tiempo indicado, se enjuaga el cabello con abundante agua y se procede a peinar. Este procedimiento deberá repetirse de dos a 3 veces por semana.
Mascarilla de coco y almidón
Ingredientes
- ½ coco fresco rallado.
- 1 cucharada de avena molida.
- 1 cucharada de almidón.
- ½ taza de leche.
Preparación
La mascarilla se prepara colocando el coco rallado en una licuadora junto a la avena y la leche. Luego de haberlo mezclado, se eliminan los residuos a través de un colador. A continuación se disuelve el almidón en agua y se lleva a fuego lento. El resto de los ingredientes se incorporan para ser calentados hasta formar una especie de crema.
Esta mezcla debe enfriar antes de ser aplicada en el cabello húmedo. Deje actuar durante 30 minutos antes de enjuagar con abundante agua y peinar el cabello.
Mascarilla de huevo y leche
Ingredientes
- 1 huevo.
- 2 tazas de leche.
Preparación
En las dos tazas de leche, agregar el huevo y mezclarlo de forma enérgica. Con el cabello humedecido, agregar la mezcla y peinar para esparcirla. Al secar, peinar reiteradas veces hasta cumplir 30 o 40 minutos. Para finalizar, enjuagar con abundante agua. Repetir de dos a tres veces a la semana.
Mascarilla de leche y miel
Ingredientes
- 1 taza de leche.
- ½ taza de miel.
Preparación
Mezclar la leche y la miel. A continuación aplicar en el cabello seco y dejar por una hora para que se activen sus beneficios. Para finalizar, enjuagar la cabellera.
Repetir de dos a tres veces por semana.
Consejos extra para mantener el pelo nutrido
- Haz uso de alguna de las mascarillas nutritivas mencionadas anteriormente. Sustituir por el acondicionador de dos a tres veces por semana.
- Envuelve la cabellera en un gorro térmico o papel film para activar los componentes de la mascarilla y favorecer la penetración de los mismos. Mientras más tiempo pueda dejarse el producto en la melena, los resultados serán sorprendentes.
- Recuerda que además de las mascarillas caseras, existen infinidades de marcas en el mercado que ofrecen productos nutritivos para el cabello con un éxito garantizado.
- Procura secar el cabello con una toalla de microfibra. Esto ayuda a que los nutrientes se mantengan dentro de cada hebra, sin levantar la cutícula.
- Haz uso de cepillos y peines de fibras naturales. Es muy recomendable peinar el cabello con los dedos para minimizar los daños a la cutícula.
- Utiliza protector solar para el cabello.